miércoles, 10 de enero de 2007
jueves, 4 de enero de 2007
El dragón rojo (II)
Con la confianza que da el haber derrotado a unos enemigos tan poderosos como los trolls, el grupo de aventureros se dirigió a la guarida del dragón. Tenían preparado el más adecuado de los planes posibles: la maniobra skywalker.
El resultado no fue el esperado: nadie murió. El grupo se enfrentó con el más temible de los enemigos, que suma una fuerza increible, una gran astucia y poderes mágicos. El dragón les derrotó con cierta tranquilidad y a duras penas consiguieron huir sin haberle producido más que un accidental rasguño. Blind Justice y Diaco necesitaron de todo su valor heroico para resistirse a una muerta casi segura.
Después de reflexionar profundamente, el grupo volvió a la carga. Decidieron elaborar un poco más la manera de entrar en la cueva y de luchar con el dragón, con lo que su maniobra llegó a la categoría de "plan". Con ello consiguieron poner en aprietos al dragón rojo que, después de tumbar al druida y a su tigre, se envolvió en unas nubes de humo que le protegieron mientras se curaba.
Esto lo aprovecharon los aventureros para salir huyendo llevándose a sus compañeros caídos con ellos... excepto Diaco, que robó un puñado de los rubíes del dragón y escapó por uno de los túneles secundarios. A causa de su profundo desconocimiento del terreno, se perdió por el laberinto subterráneo de cuevas y cavernas, sobreviviendo gracias a las bayas de Omar que llevaba consigo. Omar, después de descansar un día, envió a un murciélago a buscar al bardo, que consiguió volver a la cueva del dragón.
Una vez allí y viendo que el dragón le esperaba, utilizó todos los hechizos de ocultación de su arsenal y, esquivando al dragón en el último suspiro y recibiendo nada más que un pequeño coletazo, escapó de la cueva maldita.
Y más resueltos que nunca, el grupo se prepara para volver a por el dragón rojo.
El resultado no fue el esperado: nadie murió. El grupo se enfrentó con el más temible de los enemigos, que suma una fuerza increible, una gran astucia y poderes mágicos. El dragón les derrotó con cierta tranquilidad y a duras penas consiguieron huir sin haberle producido más que un accidental rasguño. Blind Justice y Diaco necesitaron de todo su valor heroico para resistirse a una muerta casi segura.
Después de reflexionar profundamente, el grupo volvió a la carga. Decidieron elaborar un poco más la manera de entrar en la cueva y de luchar con el dragón, con lo que su maniobra llegó a la categoría de "plan". Con ello consiguieron poner en aprietos al dragón rojo que, después de tumbar al druida y a su tigre, se envolvió en unas nubes de humo que le protegieron mientras se curaba.
Esto lo aprovecharon los aventureros para salir huyendo llevándose a sus compañeros caídos con ellos... excepto Diaco, que robó un puñado de los rubíes del dragón y escapó por uno de los túneles secundarios. A causa de su profundo desconocimiento del terreno, se perdió por el laberinto subterráneo de cuevas y cavernas, sobreviviendo gracias a las bayas de Omar que llevaba consigo. Omar, después de descansar un día, envió a un murciélago a buscar al bardo, que consiguió volver a la cueva del dragón.
Una vez allí y viendo que el dragón le esperaba, utilizó todos los hechizos de ocultación de su arsenal y, esquivando al dragón en el último suspiro y recibiendo nada más que un pequeño coletazo, escapó de la cueva maldita.
Y más resueltos que nunca, el grupo se prepara para volver a por el dragón rojo.
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